-Siempre tan dulce My Rulan- Soltó una risita característica de el, llena de armonía y elegancia. Tomo de su mano y se levanto ignorando el dolor en su cuerpo. Podía sostenerse y no abusar del menor; Si estaba así era por su propia culpa, sus decisiones lo llevaron a ese grado.

Una vez arriba soltó el agarre llevando su mano directamente a la cintura del contrario atrayendo lo de costado. Fue firme y no aflojaría el agarre. -Esos hombres conocerán tu ira si es que los capturan, lo mas seguro es que no hallen por donde debido al aumento de centinelas en este bosque...- Recordando los acuerdos por aumentar la seguridad del lugar. -Anda, que no pienso quedarme de pie mucho tiempo- pidió el mayor dando el el primer paso.