-Eren no estaba nervioso, sino molesto, y aunque Adam decía las cosas con seriedad viró su vista hacia la niña que yace un poco asustada por la situación tan densa que se propicia.-

E: No eres quien para venir amenazarme con tus poderes de mago barato. Serás el hijo adoptivo del comandante Erwin, pero veremos si puedes convertirte en un titán. Si es así, entonces hazlo en vez de presumir con tus trucos de pacotilla de adivinador de quinta. -Eren frunció su entrecejo, impulsivo y sin temerle al joven rubio.-

E: Vámonos, Sapphire... -Casi empujaría al rubio con la fuerza de su hombro, tomando a la niña con brusquedad.- E: O quizá quieras quedarte con este energúmeno y tú no puedas realizar tus tareas. ¡Oh, si lo olvidaba! ¡soy yo quien está al mando de tus tareas por orden tuya ¿No es así, líder Hanji? Incluso el capitán Levi o el comandante Erwin siquiera se quieren manchar las manos con ella, menos tú, "señor Adam"