Se levanto raudo del sofá dando firmes pasos provocando un solido eco, la poca luz que iluminaba el lugar no alcanzaba a mostrar el rostro del ancestral, la oscuridad servía como una mascara que solo dejaba ver el brillo carmín de sus orbes oculares, no hacía falta ver ese atractivo rostro para percibir lo irritado que ya estaba. Su aura oscura que lo rodeaba se densificaba a cada paso que daba acercándose mas al pelirrojo, cuando estuvo muy cerca de él lo tomo rápidamente del cuello por la parte de atrás y lo sometió contra el suelo con violencia asegurándose de que su trasero permanecieran levantado, giro su rostro buscando con la mirada el dildo mas grande y grueso, al localizarlo estiro su mano para alcanzarlo, ya en su poder sin antes lubricarlo se lo metió por completo en el culo en un solo movimiento. —¿Esto es lo que quieres, no? Que te traten como lo que eres, como toda una puta— Comenzó a mover su mano de adelante hacia atrás.