Diablos, lo peor es que su última patada había sido interceptada por aquel. Aunque no podía moverse, forcejeaba para soltarse mientras veía el rostro inexpresivo y carente de vida de Kaiba. No quería darse por vencido, hasta que juntó las fuerzas necesarias dando un tirón con su pierna y salir de aquel agarre. Pero no se lo perdonó, no en esta ocasión . Muchas han sido las veces en las que escuchó a Seto burlarse de el, de sus amigos y de todo lo que lo rodea, esta vez haría justicia por mano propia, tuvo que ser el golpe más fuerte. Le golpeó el rostro justo en la parte del labio inferior , lo que pronto causaría una pequeña herida, al menos una de las muchas que ese bastardo le causó a el.
—.....—
Hizo un par de pasos hacía atrás perdiendo el equilibrio , cayendo delante de su amiga.
—He..... hehe lo siento, pero no pude resistirlo. Supongo que nunca voy a aprender la lección, pero al menos pude hacer lo que muchos han querido en su vida—[/code]
