Una mujer entra a un bar, dice que te vez interesante después de estar ebria. La acompañas a su casa por cortesia, intercambian datos y salen por un tiempo. Ella te dice que tienes la agilidad y personalidad de un felino, te dice que eres su ángel. Tiempo después te enteras que era una mujer algo desquiciada y tenía parientes peculiares. Tienen una discusión pequeña y ambas partes se separan quedando en "Buenos términos" Un año después, te encuentras a esa belleza fuera del bar y ahora con 6 matones a tu alrededor. Ella te da un último beso en los labios y caes lleno de plomo.
Así es querida princesa, es curioso que eso mismo que me mató sea lo que todos seguimos buscando.
Pero, gracias al alcohol ese sentimiento se difumina un poco y es más fácil sobrellevar ese calor en el pecho, además, siempre es más divertida la inconsciencia que otra cosa.
