—Paseaba alegremente por la frontera del bosque del santuario al ver un grupo de jóvenes se acerca a saludar y uno de ellos avanzo jalandola del brazo hiriendola en la zona con sus garras y dándole una fuerte bofetada cortando cerca de su ojo con sus garras viéndola fijamente mientras advirtiéndole que los dragones debían quedarse en su territorio, quedando en estado de shock solo mantiene su vista perdida y sujeta su brazo herido el cual sangraba levemente sin decir palabra alguna mientras aquellos jóvenes de varias especies la rodearon dispuestos a atacarla. — No se debe cruzar los limites..
-No estaba escuchando desde el día anterior no era capaz de poner atención, puso a su prima detrás de él y sin siquiera pensarlo o meditarlo movió su espada con fuerza dándole muerte a dos de los sujetos, la electricidad bajo sus pies parecía hacer estragos un par de colmillos se hicieron presente y de sus dedos sus uñas parecieron alargarse dejando a la vista al fin sus garras- Voy a matarlos, los matare a todos.... no dejaré que ningún maldito lobo vuelva a tocar a mi familia -Hablo lleno de odio, y más al ver a su prima herida por causa de aquellos malditos Lycan, estaba seguro que podría pero a la vez parecía que su poder se salía de control, tal vez su lado Dragón estaba a punto de resurgir-
