— No tenía tiempo ra mirar atrás, por lo que usa ambas piernas para recibirlo con una patada de frente. Apoyado de lo que encontró para ejercer presión y así darle daño a su contrincante. Antes de que su cuerpo llegue a un colapso, aunque con ello tenga que sacrificar parte de su cuerpo.
Ya teniendo la espalda sangrante, el dolor poco a poco empieza a menguar, por lo que usa la fuerza que le queda en los brazos para sostenerse y escapar de las filosas plumas. —