Ella no lo sabía del todo pero algo en su interior la mantenía alerta, inquieta y algo atolondrada. Se puso un vestido largo color rosado y trato de peinar un poco su cabello tratando de ser lo suficientemente rápida para llegar al encuentro.

Entro al granero con total confianza ya que era un lugar que conocía a ciegas y al ver la escena que este tenía preparado se detuvo llevando sus manos hasta su boca para tratar de ocultar su sorpresa.

—Esto es...supera toda espectativa.— El ambiente cálido logro que se tranquilizase un poco así que luego de respirar profundamente acorto la distancia hasta la mesa,deslizando sus dedos por esta mientras observaba de reojo a su compañero.

—N-no lo entiendo...no era necesario esto...es perfecto.—