-Aquella mirada sobre sí misma le encantaba, se sentía admirada amada y sobre todo deseada eso prendió cierto interruptor en la oji rubí pasando así de la timidez y el recato a la mujer entregada y pasional, aquella faceta que solo su amado conoce.
Se dejó acorralar entre los posesivos brazos de su alma gemela y entonces con sus dedos traviesos desfiló uno a uno por los botones superiores de aquella camisa exhibiendo su piel dispuesta claro a besar cada rincón que le fuese permitido aquella exposición-

Concuerdo contigo cariño… pero la solución es muy sencilla… adiós a lo que mucho estorba….