-Conozco lo que hay en el extremo de la etiqueta, pero tambien se me da muy bien explorar lo que hay del otro lado del cordón

Aquella sonrisa cargada de picardia no se escapa de los labios de Kiria, sin embargo, es sorprendido con la manera en la que el hombre se escabulle de entre sus brazos para dar a parar a la ventana, notandose la confusion en el rostro del incubo hasta darse cuenta de lo que estaba sucediendo gracias a sus palabras. Suelta una leve risa, no en son de burlarse, solo le parecia algo graciosa la situacion, llevaba tiempo sin experimentar algo parecido

- Puedo esperar, no tengo problemas con eso

Le comenta caminando hasta quedar a un lado de él, apoyandose en el marco de la ventana para mirar las vistas tan hermosas que esta ofrecía

- Estoy cerca del termino, tengo fecha para el 11. Quizas despues... podamos tomar una noche para esto

Iba a tener paciencia con el mayor, su experiencia venia con muchas cosas y el saber esperar era una de ellas