-Con escombros de un lugar ya azotado por una guerra anterior a su llegada, Herakles preparo un campamento con toda la chatarra restante ignorando los retazos de banderas. No se siente orgulloso de vivir de la chatarra, pero esto solo seria temporal si es que logra conseguir el oro suficiente para comenzar una ciudad-
Prácticamente cuando la noche ya había recubierto el cielo, regesso arrastrando el cadáver de un guerrero serpiente y una trampa para osos en una pierna, todo cuidadosamente y ruidosamente arrastrado por el camino. -Argh...ah..espero, te guste la carne de serpiente, no encontré nada más. Enciende una buena fogata quebesta noche se come bien.-
