En el momento que David avanzó pudo observar que se encontraba justo bajo la armazón de un edificio que apenas estaba siendo levantado, viga de acero sobre viga de acero se observaba ese patio con herramientas de construcción, tractores, contenedores, entre otros. Allí cuando David pisó adelante, y la lluvia comenzaba a caer pudo notar que su zapato fue manchado por un charco carmesí, sin duda sangre humana.

Si este observase hacia abajo notaría la figura de un tipo con un mohawk rosa, con bastantes implantes y con un claro tiro en medio de la frente. Además de uno de sus brazos cortados, inclusive cauterizado. Los gritos fuertes continuaron, mientras uno de los pandilleros vociferaba. ━━ ¡Vamos pequeña mierda sal de ahí ahora mismo! ━━ Si David ponía atención desde su escondite, notaría a un grupo de cuatro pandilleros, bastante excéntricos con ropas llamativas, tatuajes, mohawks coloridos y bastantes aumentos cibernéticos, la cosa estaba fea. (...)