-La sorpresa le asaltó al instante y Sapphire alzó su vista al muchacho de oscura cabellera, completamente incrédula, pero muy conmovida por la grata sinceridad y acto recíproco del muchacho.-
- ¿De verdad, V?... ¡Oh, qué bellos son! ... Yo, no sé qué decir, jamás había tenido amigos como ustedes, y... .... -Sonrió al mismo tiempo que sus ojitos muestran ese dulce momento, finalmente había valido la pena haberse adentrado en la ciudad infestada de seres demoníacos, encontrando al joven, un tesoro enmedio del desierto.-
- Gracias por todo, V. -Añadió en última instancia.-