— No te juzgo, me quiero bañar contigo, ama ~

Bajo aquella mano la cual acosaba a la pelirroja para dejarla libre, sonríe ladina al ser piqueada en su mejilla.

— Hay agua caliente en la bañera y unas deliciosas sales aromáticas para el cuerpo ¿Que esperamos?

Tenía una mirada más coqueta tomando con su mano la ajena para llevarla a la habitación de baño.