- Vaya qué misteriosa, pero supongo que es justo considerando que... soy policía y no puedo develar muchos secretos tampoco. - Admitió rascando su mejilla, suspirando y mirando hacia el frente, caminando sin rumbo, pero era bastante claro que sus pies instintivamente le llevaban a algún lugar. La tienda de donas. (?) -¡Uh! Mira qué casualidad dónde acabamos ¿Quieres algo de comer o café?