Luego de que el mesero de retirara con su orden, la jovencita se distrajo un momento revisando su móvil, y sin darse cuenta, el chico ya estaba de regreso, colocando el postre frente a ella en la mesa -Gracias... -Al acercar un poco más el plato, logra encontrar una nota, la cual toma entre sus manos y lee con curiosidad -Vaya... -Tras leer el contenido de la nota, la castaña no puede evitar reír un poco.

¿Qué de malo podría tener quedarse a conocer a ese chico? Ella no lo sabía, pero sentía curiosidad y amaba conocer gente nueva, así que decidió que lo esperaría. Vuelve su mirada hacia Ikki y con una dulce sonrisa, asiente con la cabeza, aceptando esperarlo hasta el final de su turno, el cual no tardaría mucho, ya que solo faltaba menos de una hora.