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"Señorita Fiore. Lamentamos haber extendido su solicitud, sin embargo tras revisar sus referencias y preparación en su currículum queremos solicitar una entrevista para determinar y formalizar su interés en el puesto como fotógrafa forense.
Agradecemos su atención, esperamos ansiosos su respuesta."

Leía su correo electrónico, estaba sentada en el sillón con la computadora sobre sus piernas pero inevitablemente respiró profundamente haciendo el equipo a un lado para recostarse en el sofá. —¿Cómo le diré a Alana algo así?...—
 
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LF1569847 · 26-30, F
Cómo era de esperarse saldría de casa, no solucionaría las cosas. Esperaría a que estuviera más tranquila, llegaría con algún regalo pensando que con eso podía solucionar todo...— No te preocupes Lancelot...— llamo al cachorro abrazándose a el, miró a la puerta y frunció el ceño. Detestaba que las cosas fueran así. Se levantó de su lugar, se dirigió al minibar y tomó una botella y un vaso para después irse a la habitación donde habían discutido previamente. —Le dije cosas horribles...— ¿Pero que podía hacer ahora?. Solamente esperar...beber y esperar.
AC1569878 · 31-35, F
—¿En verdad te estoy haciendo sentir tan infeliz?— Sus palabras le habían provocado una gran angustia. Ni siquiera intentó obligarla a mantenerse cerca, y dio un paso atrás cuando sintió el empujón. Estaba destruyendo lo que más amaba, y no pudo evitar odiarse... y tampoco hacer más que simplemente observar como salía de la habitación. Llevó la diestra a su frente y presionó sus sienes. Había arruinado las cosas y no sabía si podría remediarlo...

Rápidamente se vistió, sentía que se ahogaba en esa habitación en la que aún hacían eco las palabras de Lynn. Tomó su chamarra y sin decir nada, ni siquiera hacer caso al cachorro que acompañaba a su dueña recostada en el sofá y que ladraba para que Alana no se fuera, salió del apartamento.
LF1569847 · 26-30, F
— Hagamos las cosas a tu manera si eso te hace sentir más segura, pero los canarios también pueden de morir en sus jaulas.— Levantó sus manos solo para empujar a la mayor y abrirse paso para alejarse, tomó una almohada, una cobija y se dirigió a la puerta de la habitación. — No se por cuánto tiempo pueda soportar esto, Alana. Ya no se trata del tipo de vida que llevamos, se trata de tu falta de confianza hacia mi y tú exagerada forma de protegerme. Recuerda que ya me fui una vez.
LF1569847 · 26-30, F
Se sintió derrotada cuando Alana le dió esa respuesta tan tajante, su mirada se clavó en un punto fijo de la habitación y en cuanto la mayor de acercó a ella no rechazo la cercanía pero tampoco la aceptó. Ni siquiera la miró. Por supuesto que entendía su miedo, imaginaba como debió sentirse al verla mal herida pero eso le habría pasado con o sin ella. — Deja de pensar que soy débil, que soy frágil...deja de tratarme como si no fuera capaz de sobrevivir. — apartó su mano y levantó la mirada frunciendo el ceño. — Escapé de casa para hacer mi vida, quería superarme, quería hacer tantas cosas y ahora mi vida se reduce a permanecer encerrada pretendiendo ser la mujer feliz y conforme de la casa.—
AC1569878 · 31-35, F
—No lo sabes...— Se levantó y caminó hacia ella, prácticamente acorralándola, aunque con cariño colocó la palma de la mano sobre su mejilla y usó el dedo pulgar para limpiar sus lágrimas. —No puedo soportar la idea de que alguien te haga daño, mucho menos de perderte... Y es precisamente por eso, porque eres mi chica...— Rodeó su cintura con la mano libre para acercarla un poco a su cuerpo. —No tienes idea de lo que sentí cuando te vi cubierta de sangre, golpeada... Iban a matarte y yo no pude protegerte. No fui lo suficientemente cuidadosa. No quiero repetir ese error.
AC1569878 · 31-35, F
—Si, por eso lo encerré. ¿Qué querías que hiciera? ¿Que lo soltara por ahí a su suerte para que provocara un baño de sangre y que lo dejaran como colador para detenerlo? Quiero que las personas que me importan estén a salvo. Y si esa es la única forma en la que puedo controlar lo que suceda, entonces la tomaré.— Sus palabras eran tajantes. La miró hacia arriba cuando la confrontó, también estaba enojada, porque ella no comprendía lo que había en su pecho, no entendía que la sola idea de verla en peligro le partía el alma y le causaba dolor.

La había encontrado casi muerta cuando la secuestraron, y desde ese día, Alana se había vuelto aún más paranoica. Incluso había insistido en mudarse de apartamento a lo que Lynn se había negado.
LF1569847 · 26-30, F
—¡Y lo sé!, se que es porque te preocupas. Pero no puedes simplemente enjaular a las personas que amas esperando que de esta forma nada les suceda. — sollozó retrocediendo hasta recargarse en la pared que quedaba justo a un lado de la puerta del baño. —Te amo a ti, se que te preocupas por mi...pero... ¿Cuánto tiempo crees que pueda amar esta vida?. ¿Huh? — Se cruzó de brazos, se abrazaba a si misma antes de limpiar sus ojos con las mangas de su pijama. — No soy Liam, soy tu novia. Tampoco soy un objeto de porcelana que va a romperse tan fácil. —
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¿De verdad pensaba que lo hacía por gusto o capricho?. En ese momento sintió mucho enojo, ¿Realmente estaba en el lugar correcto?. ¿Alana realmente la conocía?. Todo lo que había atravesado con su familia era un claro ejemplo que Lynn no era del tipo de mujer a la que se le reprimía con facilidad y le costaba creer que Alana no se hubiese percatado de eso. — ¿Y por eso lo encerraste verdad?. — señaló inmediatamente al momento de ponerse de pie frente a ella, quizás, la primera vez que confrontaba a Alana. — Quiero que confíes en mí, quiero dejar de tener que preguntarte si lo que voy a ponerme muestra demasiado, quiero poder salir sin que estés mirando mi maldita ubicación. —
AC1569878 · 31-35, F
Y aún así buscas ponerte en peligro por mero gusto, ¿Qué es lo que intentas demostrar?— Lo único que había podido pensar en aquél entonces fue poner a su hermano dentro de una jaula de comodidades, a salvo, con compañía, y sin darse cuenta del todo lo mismo estaba haciéndole a Lynn.
AC1569878 · 31-35, F
La albina parecía alguna clase de bestia enjaulada... ¿Por qué Lynn no podía entender que solo quería lo mejor para ella? Trató de protegerla desde que la conoció, como si fuera la frágil bailarina de una caja musical que temía se rompiera al más mínimo contacto. ¿Estaba equivocada? ¿No era eso amar?...

—¿Acabas de compararme con tu horrible familia?— Resopló y desvió la mirada. Luego se sentó sobre el colchón. Necesitaba calmarse o iba a explotar. En ese momento le habría gustado que Lynn viera el mundo a través de sus ojos... Si insistía en que había riesgo, era nada más que la verdad. Cerró los puños con fuerza, apoyados sobre sus muslos. —Tú no tienes idea. Liam casi muere por mi culpa, ¿Crees que quiero que te suceda lo mismo a ti? ¿Crees que estoy tranquila sabiendo que estar conmigo puede costarte caro?...

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