La hidrocele testicular se trata cuando el líquido seroso es retenida de más del límite en en el cordón espermático, entre las dos capas de la túnica vaginal que recubre el testículo y la cara interna del escroto.

En el tratamiento se procede al reducimiento de este líquido acumulado por jeringuillas. Solo es en el caso que no sea recomendable una intervención quirúrgica en el paciente, sean cuales sean las circunstancias.